SALVANDO LA CASA.Por: Adonías Morales.
Hebreos 11:7 Por la fe Noé, cuando fue advertido por Dios acerca de cosas que aún no se veían, con temor preparó el arca en que su casa se salvase; y por esa fe condenó al mundo, y fue hecho heredero de la justicia que viene por la fe.
Cuando hablamos de salvar nuestra casa, como padres jóvenes nos preguntamos. ¿por dónde y cuándo empezar?, un par de preguntas que trataremos en este tema.
Dónde?
La biblia nos da una recomendación clara de dónde debemos empezar a cumplir nuestra función básica "la enseñanza de la verdad bíblica"...
DEUTERONOMIO
6:4 Oye, Israel: Jehová nuestro Dios, Jehová uno es.
6:5 Y amarás a Jehová tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas.
6:6 Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón;
6:7 y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes.
6:8 Y las atarás como una señal en tu mano, y estarán como frontales entre tus ojos;
6:9 y las escribirás en los postes de tu casa, y en tus puertas.
6:5 Y amarás a Jehová tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas.
6:6 Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón;
6:7 y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes.
6:8 Y las atarás como una señal en tu mano, y estarán como frontales entre tus ojos;
6:9 y las escribirás en los postes de tu casa, y en tus puertas.
De acuerdo a estos pasajes, debemos aprovechar cada actividad de la vida para hablarles a nuestros hijos y familia de nuestra relación con Dios. Piensa en este momento como puedes aprovechar para enseñarles cuando estás en tu casa, trabajo, vacaciones en fin en la actividad que estés desarrollando.
Sin embargo, lo más importante de este pasaje es que la responsabilidad de transmitir estas verdades bíblicas se nos es dada a nosotros como padres, (I SAMUEL 3:13), no a la Escuela o a la Iglesia o a una tercera persona.
Es muy fácil en este tiempo encomendar esta tarea a alguien más o simplemente no realizarla, ya que en muchos casos el trabajo, ministerio u otra ocupación parece demandar aún, este tiempo que debemos invertir en esta importantísima tarea.
Cuándo?
Entre más temprano mejor. El Dr. Dobson en uno de sus libros lo ilustra de esta manera:
Después que un ganso sale del huevo, se apega o se graba a la primera cosa que ve moviéndose cerca de el, lo cual es por lo general la mamá gansa. Sin embargo, si la mamá gansa no se encuentra allí el gansito se puede apegar a cualquier cosa sustituta que se esté moviendo. De hecho, un gansito se apegará fácilmente a un pelota azul que se lleve de un hilo. Una semana después, él se colocará en línea detrás de la pelota cuando esta pasa cerca de él. El tiempo es el factor crítico. él pequeño ganso es vulnerable a apegarse solamente durante unos segundos después que rompe el huevo. Si se pierde esa oportunidad, no puede ser recuperada.
De igual manera hay un tiempo breve cuando los niños son más receptivos a la enseñanza de Dios y acerca del bien y del mal, y esta etapa se encuentra entre los cinco y trece años. Esta es la época cuando están abiertos y receptivos al llamado de Cristo.
Cuando nosotros como padres escogemos no darles la instrucción bíblica dejando que él decida por si mismo, es casi una garantía que escogerá lo negativo.
Lo más importante en la enseñanza, es saber que los hijos aprenden más del ejemplo que de las muchas palabras.
Para terminar este tema quisiera compartir las palabras que mi padre dijo el último de su vida aquí con nosotros "No hay satisfacción más grande para un padre que el ver a sus hijos teniendo una verdadera relación con Dios"
Proverbios 22:6, Juan 3:16, Salmo 143:10
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